- Portada
- Presentación
- Tema 1. Geografía celeste
- Tema 2. Movimiento de rotación
- Tema 3. Coordenadas ecuatoriales
- Tema 4. El modelo de las dos esferas
- Tema 5. La Luna
- Tema 6. Las 4 estaciones
- Tema 7. Relojes de Sol
- Tema 8. Calendarios y eclipses
- Tema 9. Los Planetas. Cinemática
- Tema 10. El Sistema Solar.
- Tema 11. La Tierra y la vida
- Tema 12. Prismáticos y telescopios
- Tema 13. Una noche de observación
- Tema 14. Distancia a las estrellas
- Tema 15. Vida y muerte de las estrellas
- Tema 16. La Vía Láctea
- Tema 17. Galaxias
- Tema 18. Cosmología
- Anexo. Grandes astrónomos
- Bibliografía y Webs
12.3 La montura
Sin duda la parte óptica es la más importante en un telescopio, pero también hace falta un sistema que soporte los espejos o lentes debidamente alineados, que permita su movimiento rápido para apuntarlo hacia el objeto que nos interese, que pueda mover el telescopio con suavidad para que siga apuntando hacia ese objeto (que, como todos los astros, se mueve de Este a Oeste, visto desde la Tierra) y que sea estable para que no tiemble con el viento (lo que hace muy incómoda la observación). Todas estas funciones las desempeña la montura o soporte del telescopio. Hay de diversos tipos:
Horizontal, Acimutal o Altacimutal
Permite mover el telescopio según dos ejes, uno vertical y otro horizontal (figura 12.12). Es cómoda de manejar porque tiene unos movimientos “naturales” a los que estamos habituados. En los telescopios reflectores a veces se utilizan monturas muy simples que no requieren mandos para los movimientos lentos y que, además pueden soportar tubos de gran volumen. Son las monturas tipo Dobson. Son relativamente fáciles de construir pues, básicamente, son dos cajones ensamblados por unos ejes que efectúan el rodamiento sobre aros y tacos de teflón, lo que les hace suaves y estables (figura 12.13). Naturalmente estas monturas también se comercializan siendo, por su sencillez, las más baratas del mercado (figura 12.14)
Pero los objetos celestes se mueven según paralelos de la esfera celeste. Una estrella como Antares, que se ve hacia el Sur, se va desplazando hacia la derecha (de este a Oeste) y además sube o baja según esté saliendo o poniéndose. Para mantener el telescopio apuntando hacia ella hay que moverlo alrededor de dos ejes y esto, que sucede al observar cualquier astro, es una incomodidad. Para evitarla se recurre a las monturas ecuatoriales
Ecuatorial
Tiene un eje paralelo al de la Tierra de forma que el telescopio se mueve lo mismo que esta, pero en sentido contrario, deshaciendo el movimiento de rotación. Así, mantenerlo apuntado hacia un mismo astro resulta más cómodo que con una montura horizontal. Este tipo de montura es imprescindible si se quiere realizar fotografía con telescopio.