- Portada
- Presentación
- Tema 1. Geografía celeste
- Tema 2. Movimiento de rotación
- Tema 3. Coordenadas ecuatoriales
- Tema 4. El modelo de las dos esferas
- Tema 5. La Luna
- Tema 6. Las 4 estaciones
- Tema 7. Relojes de Sol
- Tema 8. Calendarios y eclipses
- Tema 9. Los Planetas. Cinemática
- Tema 10. El Sistema Solar.
- Tema 11. La Tierra y la vida
- Tema 12. Prismáticos y telescopios
- Tema 13. Una noche de observación
- Tema 14. Distancia a las estrellas
- Tema 15. Vida y muerte de las estrellas
- Tema 16. La Vía Láctea
- Tema 17. Galaxias
- Tema 18. Cosmología
- Anexo. Grandes astrónomos
- Bibliografía y Webs
5.3 Posición respecto a las estrellas.
Como la Luna puede observarse por la noche a la vez que las estrellas, si apuntamos su situación sobre el telón de fondo de las constelaciones podremos apreciar qué posición ocupa entre ellas. En los dos mapas vemos que la Luna se va desplazando: comienza su andadura (el 9 de diciembre 2016 en creciente avanzado) en Piscis y pasa por delante de las constelaciones de Cetus (al sur de Aries), Tauro (luna llena), Géminis, Cáncer, Leo y, en el segundo mapa, Virgo (cuarto menguante), Libra, entre Escorpio y Ofiuco, al norte de Sagitario (inobservable por ser luna nueva), Capricornio, Aquario y, de nuevo, Piscis (cuarto creciente). Son las constelaciones del zodiaco (salvo Cetus y Ofiuco); la Luna siempre se encontrará en esa banda.
El momento en que es más fácil observar la Luna es en cuarto creciente, porque se ve durante la primera parte de la noche y no deslumbra todavía demasiado para observar simultáneamente las constelaciones. En los mapas siguientes se sitúan todos los cuartos crecientes del año 2016:
De nuevo vemos cómo las posiciones se van desplazando por la banda zodiacal avanzando con regularidad de mes en mes: no hay una constelación asociada a cada fase de forma repetitiva, sino que todas las fases van pasando por delante de las diferentes constelaciones del Zodiaco.
A lo largo de su recorrido zodiacal a veces está más alta (“por encima” del ecuador) como el 15-3-2016 (figura 5.8) y otras bastante “por debajo” (como el 9-10-2016, en la figura 5.9); esto quiere decir que su declinación no es constante y eso explica que en su recorrido por encima del horizonte no siempre salga por el E exactamente; a veces lo hará algo hacia el N (y su trayectoria aparente será más alta) y otras un poco hacia el S alcanzando menor altura máxima.
Otra cuestión interesante, aunque no muy frecuente de observar, es que en su recorrido por el zodiaco nuestro satélite pasa “por delante” de las estrellas y puede “taparlas”, puede bloquear la luz de una estrella determinada al interponerse entre ella y la Tierra. Este fenómeno se llama ocultación de un astro por la Luna. Lo que puede ocurrir es que, si la estrella es muy tenue, apenas perceptible a simple vista (de magnitud 4 o mayor), ni nos enteremos de ello.
Pueden resultar espectaculares si el objeto ocultado es brillante y la Luna está próxima a la fase nueva (en luna llena su brillo fulgurante desluce estas observaciones). Los candidatos a ser ocultados son los que estén en la trayectoria lunar, es decir en la estrecha banda zodiacal, como los planetas y algunas estrellas destacadas de esa zona: las Pléyades, Aldebarán, Régulus o Spica. Haz clic aquí para ver una simulación. En esta dirección puedes encontrar información sobre las próximas ocultaciones: